El Presidente

Desde esta ventana al mundo, quiero agradecer el interés de quien lea estas líneas, invitándoles a conocer esta, su casa.

Supone para mi el mayor de los orgullos presidir una entidad social y deportiva que nace en 1910 y se ha convertido en un referente en Gran Canaria.

Estamos en un punto privilegiado, la Playa de Las Canteras en la zona portuaria de nuestra ciudad y en uno de los barrios con mayor carácter de la misma, La Isleta.

Somos como el entorno que nos acoge, hospitalarios, abiertos, tolerantes y sobre todo integradores. Forjados en el espíritu de los que fundaron nuestra entidad, pioneros en la introducción en Canarias de deportes como el fútbol, el boxeo o el ciclismo.

Somos deporte, fue nuestro origen. El fútbol nos llevó a ser grandes y fruto de esa grandeza nació La Unión Deportiva Las Palmas, que luce orgullosa nuestra corona en su escudo. También somos náutica, hemos hecho del mar que nos rodea nuestro particular patio de juegos.

Somos un lugar donde refugiarse de los problemas cotidianos, un espacio para compartir, para disfrutar e incluso para debatir desde el respeto a las múltiples sensibilidades que nos forman.

En los últimos años hemos afrontado una profunda renovación de las instalaciones del Club, logrando un espacio más cómodo, moderno y capaz de acoger multiples actividades. Un gimnasio completamente equipado y que ha servido de vehículo para llenar nuestro día a día de juventud, un aspecto clave para nuestra pervivencia.

No son buenos momentos para clubes sociales similares al nuestro, los cambios de hábitos a la hora de sociabilizar, la irrupción de grandes tecnologías de consumo destinadas a interactuar a distancia, ponen en riesgo espacios de convivencia como el nuestro.

Esto hace, si cabe, que nuestro orgullo por cumplir años, sea aún cada día mayor.

Personalmente me quedo con la satisfacción del esfuerzo y el trabajo que cada día realizan los empleados y los directivos que me acompañan para seguir remando en una única dirección, hacer crecer la familia Victorista.

El deporte nos convirtió en leyenda, y sobre todo en un sentimiento, somos un todo, más de cien años dedicados a una pasión común.

Les invito en mi nombre y en el de los que me precedieron, a visitarnos a unirse a nuestra familia y a formar parte de la historia de una ciudad y de una isla.

Reciban un afectuoso saludo.

Francisco Medina Montenegro
Presidente del Real Club Victoria.